El invierno que azota actualmente a la provincia de Los Ríos ha superado todos los registros de los últimos 27 años.
Según los datos técnicos que maneja la Dirección de Gestión de Riesgos de la Prefectura, entre enero y abril de este año, se ha acumulado un total de 3.034 milímetros de lluvia, cifra que solo encuentra precedentes durante los fenómenos de El Niño de 1997 y 1998.
La magnitud de estas precipitaciones ha provocado inundaciones severas, afectando comunidades enteras y zonas de producción agrícola en varios cantones.
El prefecto Johnny Terán, ha desplegado una respuesta inmediata que combina acciones sociales, logísticas y técnicas para mitigar los efectos de esta temporada crítica. Antes del inicio del periodo lluvioso, se realizaron trabajos de prevención, limpieza y mantenimiento de canales, así como monitoreo continuo de los caudales y zonas de riesgo. Estas medidas han permitido reducir el impacto en varias áreas que históricamente eran las más vulnerables.
Desde que se agudizó la emergencia, los equipos técnicos y de atención social recorren los sectores más afectados entregando kits de alimentos, agua potable y asistencia a familias damnificadas. Pese a las dificultades que impone la situación vial en zonas como Palenque y Mocache, donde las rutas han quedado intransitables por las anegaciones, el Gobierno Provincial mantiene su compromiso de no dejar a ninguna comunidad sin apoyo.
Así mismo se trabaja con el sector agroproductivo para identificar las pérdidas y establecer mecanismos de recuperación que permitan proteger la economía local. “La prioridad es la seguridad de nuestra gente, pero también garantizar que el campo no quede desprotegido frente a este fenómeno extremo”, expresó el prefecto Terán.